July 2017 Prayer Partner Message
Dear prayer partners,
This month, we at the Evangelical Immigration Table invite you to join us in praying for another principle for immigration reform: Respect for the rule of law.
When discussing the rule of law, most Christians begin with Romans 13, where we read “Let every person be subject to the governing authorities.” Paul’s teaching reminds us that government was instituted by God as a means to help people living together according to His design. This means that rulers are responsible for establishing just laws, which includes the procedures for immigrating from one country to another, whether for work or other purposes. In establishing just immigration rules, our leaders should recognize the God-given dignity of every human being and the mutual benefits that flow from showing hospitality to newcomers.
Furthermore, immigrants are responsible to follow the rules established by the country to which they seek to immigrate. For much of our nation’s history, our immigration laws and policies were relatively straightforward and easy to follow. This was a win/win solution. It offered opportunities to those seeking the American dream and fueled our nation’s prosperity.
Sadly, our current immigration laws are out of sync with the needs of our labor market and often harmful to the God-ordained structure of the family. A biblically appropriate respect for the rule of law should guide us to reform a system that is not currently functioning well, restoring the authority of the rule of law while also respecting the human dignity of each person made in God’s image.
In the words of Paul Louis Metzger, Professor of Christian Theology & Theology of Culture at Multnomah Biblical Seminary, “In the end, Christians have a responsibility in our democratic society to promote and live by laws that promote God’s law of love of neighbor — documented or not, as disclosed in Scripture and embodied in Jesus Christ.”
This month, we pray for fair and effective immigration laws that uphold the dignity of the human person and respect the rule of law along with the authority of our elected and appointed leaders.
Join us in praying for:
- Christians to remember God’s command to love foreigners as themselves (Lev. 19:18, 33-34) as they practice their democratic right to vote this year in local, state and federal elections.
- Those seeking asylum and refugee status to receive a fair hearing before the courts (Deut. 1:16-17; 24:17-18; 27:19).
- Politicians, judges and law enforcement officers to create laws and enforce the rule of law in a way that honors God’s heart for immigrants (Deut. 10:17-19; 24:14-15).
In Christ,
Travis Wussow
Vice President for Public Policy and General Counsel
Ethics and Religious Liberty Commission
Southern Baptist Convention
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La Mesa Evangélica para la Inmigración lo invita este mes a orar en favor de otro de los principios de la reforma migratoria: el respeto por el Imperio de la Ley y el estado de derecho.
Cuando se discute el tema del Imperio de la Ley la mayoría de los cristianos parten de la Carta a los Romanos 13:1, que dice: “Sométase toda persona a las autoridades que gobiernan”. Las enseñanzas de Pablo nos recuerdan que el Gobierno ha sido instituido por Dios para ayudar a las personas a vivir de acuerdo a Sus designios. Esto significa que las normas son responsables de establecer leyes justas, las cuales incluyen también los procedimientos para la migración de un país a otro, ya sea con el objetivo de trabajar o por cualquier otro motivo. En la reglamentación de leyes justas nuestros líderes deben reconocer la dignidad otorgada por Dios a cada ser humano y el mutuo beneficio que se genera al manifestar hospitalidad a los recién llegados.
Asimismo, los inmigrantes son responsables de acatar las normas establecidas por el país al cual buscan migrar. Durante gran parte de la historia de nuestra nación, las leyes y políticas de inmigración han sido relativamente claras y fáciles de seguir. Esto significó una solución en la que todos ganaban al ofrecer oportunidades a aquellos que buscaban el sueño americano y estimulando al mismo tiempo la prosperidad de nuestro país.
Tristemente nuestras actuales leyes de migración no están acordes con las necesidades de nuestro mercado laboral y frecuentemente perjudican la estructura familiar ordenada por Dios. El apropiado respeto bíblico por el estado de derecho debe guiarnos en la reforma de un sistema que hoy no está funcionando bien. Debe restaurar la autoridad de la ley al tiempo que respeta la dignidad humana de cada persona hecha a imagen y semejanza de Dios.
En palabras de Paul Louis Metzger, profesor de Teología Cristiana y Teología de la Cultura en el Seminario Bíblico Multnomah: “Al final, los cristianos tienen la responsabilidad, en nuestra sociedad democrática, de promover y vivir bajo las leyes de amor al prójimo que ha designado Dios, escritas o no, tal como se describen en las Escrituras y se encarnan en Jesucristo”.
Este mes vamos a orar por una justa y efectiva ley de inmigración que preserve la dignidad de la persona humana, y respete el estado de derecho y la autoridad de nuestros líderes electos y designados.
Participe con nosotros orando…
- Para que los cristianos recuerden el mandamiento de Dios de amar al prójimo como a sí mismos (Levítico 19:18, 33-34) cuando ejerzan su derecho democrático al votar este año en las elecciones locales, estatales y federales.
- Por aquellos que buscan el status de asilados o refugiados para que reciban una justa audiencia ante las cortes (Deuteronómio 1:16-17; 24:17-18; 27:19).
- Por los políticos, jueces y oficiales representantes de la ley para que diseñen las leyes y refuercen el estado de derecho de una manera tal que honren el Corazón de Dios para los inmigrantes (Deuteronómio 10:17-19; 24:14-15).
En Cristo,
Travis Wussow
Vicepresidente de Políticas Públicas e Consejero General
Comisión para la Ética y la Libertad Religiosa
Convención Bautista del Sur